miércoles, marzo 14, 2007

QUEALGOQUEDA - Esto no es un plátano, es Caracas: y mancha

Cuando José Vicente Rangel terminó de ver Secuestro Express su declaración en calidad de alto jerarca de la nomenclatura fue: “Esa es una película miserable”. Le molestaba al hombre de la máscara que allí quedara retratada Caracas en algunos de sus ángulos más repulsivos, los policías como lo mierda que pueden ser y supongo que no le gustó mucho la escenita con el uniformado dándose duro con otro amiguito.

Lina Ron, siempre dispuesta a defender nuestros más sagrados valores nacionales, hasta la emprendió contra el director esgrimiendo su condición de judío como explicación de porqué hizo lo que hizo y como justificación para acosarle –bueno, en realidad le dijo dos o tres vainas- hasta hacerle salir huyendo del país por un tiempo, aterrado ante el thriller de toparse frente a Lina, la de la voz de trueno, y sus ángeles del infierno cabalgando esas portentosas criaturas de dos ruedas que la revolución provee a sus fieles más cartelúos.

Cuando Jesús Ernesto Parra y Leo Felipe Campos terminaron de leer el reportaje –aunque ellos dicen que no merece el calificativo- “La capital del miedo”, publicado por Cynthia Rodríguez en la revista Gatopardo seguramente pensaron. “Este es un texto miserable”. Y quizás como Lina, también quisieron hacer sentir el tronar de sus voces.

Pero Jesús Ernesto y Leo ni son del gobierno, ni tienen un programa con tanto rating como el de Lina, la de la voz de trueno. Estos dos muchachos son editores –o algo por el estilo- de la revista Plátanoverde.

Así que a cuatro manos redactaron una carta y se la enviaron a Gatopardo. Y mira tú, quizás hicieron realidad parte de su sueño de escribir algo para esa revista. Algo, hay que advertir, que no sé cómo se asume en el gremio de los periodistas pero que en cualquier otro gremio tomarían como una gran echada de paja, casi como una declaración de guerra, o como un berrinche pajúo. No sé, digo yo.

Se quejan ellos de que el texto ese es un compilado de lugares comunes, “cifras rojas y lamentos personales de una joven periodista de Caracas que opina, subraya y pontifica sobre dichos pasajes como lectura única de una ciudad (…) aún más diversa, autocrítica, amable y humana”. Hago pausa aquí porque hay algo que no me queda claro: ¿Caracas es autocrítica?

Sigamos, porque los muchachos le dan duro: “Nos preguntamos, si no sería justo con los lectores acotar que el referido texto no es más que unos apuntes particulares de una habitante de Caracas, y no la definición de una metrópoli con aristas oscuras, sin duda, pero necesitada de un relato más objetivo, más completo y tan diverso como su realidad misma”.

Uff.

Cuando leí ese reportaje lo encontré extraño y casi ajeno al tipo de contenidos que ofrece Gatopardo. Y tengo algunas reservas pero que apuntan a otras cosas: a algo parecido a alguna carencia de sustentación con argumentos sólidos de una que otra idea. Pero hasta ahí.

A los chicos del plátano parece que les molesta lo mismo que a Rangel ante la película: que la ciudad queda como la mierda que puede ser. Ellos quieren una visión más “completa”, algo así como un texto que diga: “bueno sí, tenemos el choro que jode y los motorizados hacen lo que les sale del forro; pero miren: también tenemos unos mall del carajo, unos lugares de rumba súper cool, tres o cuatro librerías depinga, el Avila que es una tripa, las arepas que son lo más, tenemos la playita a pata ‘e trocha y hay burda de mamis ricas con tetotas y todo”.

Caracas, el secreto mejor guardado del Caribe…

Cuando vi por primera vez la revista Plátanoverde, me parece que estos muchachos no estaban allí. No estoy muy seguro, así que perdonen si me equivoco. En todo caso, cuando la agarré no supe bien por dónde se debía leer aquello que más bien parecía una sucesión de tripeos de diseñadores con ganas de ser artistas. Y lo mismo me pasó con los siguientes números hasta que sencillamente dejé de buscarla porque entendí que esa publicación no estaba hecha para tipos como yo que quieren páginas con letricas e historias.

Y, atención, no estoy siendo peyorativo con esto: simplemente no iba conmigo y punto. Eso no desmerece la línea que eligieron.

Ahora, tiempo después, al leer la cartica en Gatopardo fui y compré la última Plátanoverde, una en que tratan el tema del sexo y la pornografía. Según veo, la estrategia de invitar a editores un poco mayores y con fogueo en el periodismo ha rendido sus frutos: ya hay cosas que leer, pero la mayoría son “textos”, no me atrevo a calificar a más de uno o dos de “reportajes”.

Y, atención, ese comentario tampoco intenta ser peyorativo: no todas las revistas tienen que ser de reportajes, los “textos”, cuando están bien hechos y bien escritos, son tan válidos como cualquier otro formato.

A lo que iba: los furibundos Parra y Campos deberían saber que los reportajes también tienen el derecho de enfocarse en aspectos muy precisos y determinados de temas o realidades más amplias y complejas. Y en este caso, con todo y sus fallas, el planteamiento de Caracas como una ciudad del terror es inobjetable y pertinente.

Solamente este fin de semana que pasó asesinaron en esta mierda a 55 personas. Y esa vaina pasa casi todos los fines de semana. ¿O no es así muchachones? ¿Esta no es acaso una ciudad donde hay montones de carajitos que te roban y te matan por puro placer, donde todos corremos el riesgo de un secuestro express, donde muchos policías son tan o más criminales que los de la calle, donde tienes que ponerle tres sistemas de seguridad al carro, donde si tienes una camioneta eres casi un dead man driving, donde te dan un tiro durante un atraco y te dicen “tuviste suerte” si no te dejan cagando en una bolsita?

Coño, ¿ésta es o no es una capital del miedo?

Sí, es cierto que hay mucho más. Y es cierto que por aquí todos nos las damos de chéveres y tal. Y que las mujeres están bien buenas y el Avila es una tripa. Pero el reportaje no intenta contener ni reflejar la totalidad de la urbe, ni pretende "definirla" y, además, Gatopardo no es la revista de la corporación de turismo de Caracas y el tema de la violencia y la inseguridad le puede quitar lo “amable” y lo “diverso” a cualquier caraqueño y a cualquier otra visión que se tenga de Caracas.

Así que dejen la sensibilidad “rangeliana”, porque resulta que así son las cosas aquí. Aunque eso duela. Y aunque de vergüenza que en otros países lean semejantes vainas de tu ciudad.

80 comentarios:

Anónimo dijo...

Es que tú eres mi almagemela, demalamadre. A mí me llega el news de esa cursilería circulante que es platanoverde, y la verdad es que le echo un vistazo que siempre confirma que estos tipos, criados en la ñoñería chavista, despolitizados que disfrazan su ignorancia con pseudovanguardismos pajúos, se juran los árbitros intelectuales de las nuevas generaciones. Provocan bostezos, a decir verdad. Prefiero Urbe que está buenísima.
Son unos moralistas incapaces de crítica porque están convencidos de que lo feo está en el ojo del observador, a la manera postmoderna. Por qué no se van a estudiar filosofía a ver si entienden algo del mundo?
Y por cierto que el número de la pornografía trae una ridiculez de unas mujeres escribiendo pornografía en gallego, que si la polla y el coño, aburridísimas las pobres. Deben ser unas tipas que como no tienen talento literario se lanzan unas cogidas para ver si las publican.
Coincido: que hagan lo que quieran, pero que no vengan a dictaminar cómo alguien tiene que querer u odiar o describir a su ciudad. Chavistaaaaas!

John Narváez dijo...

¿Platanoverde no trae, por casualidad, un cronograma de rumbitas y toquecitos? Creo que ese es el cometido de todos esos órganos del desierto mental que aquí impera.

Anónimo dijo...

A mí en lo personal no me agrada esa publicación, es decir, me refiero a Plátano Verde. Aunque reconozco el valor de su propuesta de diseño gráfico que es muy urbano y está a la par de las tendencias actuales de ese tipo de publicaciones alternativas que hoy existen en muchas ciudades del mundo. Pero desde el punto de vista de contenido y escritura la revista es pobre, hedonista y pseudointelectual.
Los textos de quienes allí escriben regularmente tienen fallas de estilo y redacción; algunos muy mal escritos periodísticamente hablando, otros muy aburridos; y casi todos con una característica relevante: le otorgan un excesivo protagonismo al periodista firmante en un abuso del recurso de la primera persona, una actitud que roza la egolatría y la autoalabanza.
Pareciera que quisieran ser famosos o reconocidos, eso es lo que trasmiten al lector.
También usan el recurso del humor tonto y la trasgresión de una forma casi "naif" muy similar al adolescente que desea llamar la atención infantilmente para poder captar foco.
Buena esa es mi opinión, me parece válida y respetable la revista, por supuesto, pero siempre la veo como una publicación de "teenagers" de consumo alternativo, por eso no entiendo la crítica al estilo de escritura y enfoque en el tratamiento de un reportaje de Gatopardo, porque de ser así, deberíamos empezar a diseccionar cada ejemplar de Plátano Verde y regresar a sus redactores a la escuela de periodismo.

Saludos,

Juan Carlos Álvarez

Anónimo dijo...

Creo que el reportaje de la periodista Cynthia Rodríguez que salió publicado en Gatopardo está enfocado para un lector extranjero, y a los ojos de un lector venezolano algunos puntos abordados en su reportaje son tan cotidianos que podrían ser considerados como lugares comunes.
Sin embargo, también creo que el reportaje está bien; pudo haber sido abordado bajo otros ángulos e incluido otras miradas, pero como reportaje básicamemte está bien... y bueno... es un texto sobre la violencia y la cultura del miedo en una urbe como Caracas y de eso trata el texto, no de paseos a Galipán, donde por cierto ya hay varios casos de atracos subiendo!!!
Lo que sí me llama la atención es que justamente unos chamos que se autodefinen como alternativos tengan una lectura tan conservadora
y reaccionaria a un reportaje sencillo que habla sobre una verídica realidad de nuestra ciudad.
M.A.

Anónimo dijo...

no leí el reportaje de rodríguez en gatopardo y la verdad es que ella no me mata como periodista, pero hay que reconocer una vaina que pasa con todos los periodistas venezolanos cada vez que alguien publica en gatopardo: a los demás, la vaina siempre les parecerá una cagada.
¿o no?

Anónimo dijo...

A los chamos de Plátano Verde todo lo que hagan otros que no sean ellos, que se las dan de alternativos, les huele fó. Bravo Cynthia, escribir en Gatopardo dice quién eres como periodista.

Anónimo dijo...

Plátano verde no es el mejor modelo para hablar de lecciones de periodismo, es un medio impreso urbano y ya, también reconozco que tiene su valor, pero hasta ahí, es de esos impresos que reúnen cultura electrónica, artistas emergentes, cuestionan la sociedad al estilo de "soy de contracultura", se estimulan en el diseño gráfico porque forman parte de ese medio, y en ese sentido le dan cabida a cuanto trabajo de La Caracas, Prodiseño, La Reverón, etc, etc, etc, les llega (algunos muy buenos o excelentes, por cierto)y van dirigido al target que consume los productos culturales diciendo "coño, qué arrecho".
El diseño se sobrepone al texto e impide la lectura, porque ahí lo importante es la estética para poder decir, ante los trazos y grafos: "qué arrecho", porque esa es la idea: "vender la cultura de lo alternativo" todo así como mezcladito en collage, o pa que suene más criollo, en pastiche. Porque desean que así se les vea, como algo "under".
Es otro modelo de actitud snob, pero snob al fin.
Plátano verde tampoco puede ser vista como periodismo independiente underground que surge del palpitar de la calle, de esos que señalan con el dedo "lo comercial" porque la revista es financiada por una casa productora de comerciales, que precisamente hace videos para vender jabones, desodorantes, celulares, toallas sanitarias y alimentos achocolatados.
Conclusión: la plata para hablar de lo contra, lo no convencional, lo subterráneo, lo altertanivo, lo urder, lo avant garde, "que somos" y para críticar la sociedad y "lo burdo de lo comercial", pues viene justamente de ahí, de "lo burdo de comercial".
Del texto de Gatopardo, no lo leí, así que no opino!!!
Chau!

Mariana R.

Anónimo dijo...

El reportaje sobre Caracas en gatoprado me pareció normal, y aunque creo que los chamos de Plátano verde están en su derecho de enviar una carta si así lo quieren, me parece que se pasaron, propongon que envien una carta a ellos todos los que no les gusta platano verde, acción que según parece podría hacer colapsar Ipostel
BUHO

Anónimo dijo...

El amigo Jose nieto echarri tiene razón, con lo de la "rumbita" y "los toquecitos" porque cada vez que salía una edición de plátano verde me enviaban una entrada a "la rumbita" con derecho a curda y todo (tres tragos de ron chamín), sabes cada número una rumba, a lo urbe bikini pero métele más intensos

Anónimo dijo...

Tanta vaina por la opinión de unos carajitos que son un bluff, que no saben escribir bien, que se venden como culturosos, que tienen un problema de ego enorme que da pena ajena y siempre andan por allí con pose pseudointelectual tratando de llamar la atención. No les paren bolas...
Carlos Betancourt

Anónimo dijo...

Caracas es una ciudad violenta y punto. Tanto que muchos atacan a este gobierno por su escasa capacidad para controlar a choros, sicarios y gatillos alegres que convirtieron al pais en su piñata particular. Entonces, ¿cuál es el afán con una nota que habla sobre ese tema? Para saber sobre el país bonito tenemos a Valentina Quintero. Una norma que debería gobernar todos nuestros actos es el respeto al trabajo y a las opiniones ajenas, máximo si ese trabajo esta basado en datos, numeros y estadisticas reales o si esas opiniones no incluyen racismo, desprecio por lo humano, desviaciones, etc. Para terminar, sobre Platano Verde, nunca entendi su propuesta redundante en lo grafico, con textos crípticos, densos hasta el sopor, poco madurados y sobretodo tan hinchados de ego que apenas se pueden leer. En cualquier caso, me imagino que si a los editores de Platano Verde no les gusta que se hable "mal" de Caracas es porque deben estar intoxicados por ver la vida desde una oficina en el Centro San Ignacio, aprovechando los "after offices" de Suka y Whisky Bar

Unknown dijo...

alguien dijo por allí que el reportaje de Gatopardo podía estar lleno de lugares comunes para los caraqueños. el problema es que esos "lugares comunes" son los que nos matan, nos secuestran, nos chocan o nos perforan con alguna bala perdida. la rumba es relativamente buena (tampoco es que estamos en nueva york)pero pagas caro el tiempo que la gozas: sales de allí mirando hacia los lados, aterrándote en los semáforos y sacándole el cuerpo al pana que te pide la cola porque te pueden secuestrar cuando lo dejes en la puerta del edificio.

A ese plátano le falta madurar.

Anónimo dijo...

caracas es como es... he viajado por muchos lugares en el mundo... y a la final siempre termino regresando con desesperacion a ella...

no me importa si platano es una gran revista o no, lo que valoro de estos chamos es que apostaron a un proyecto y lo hicieron... esta en la calle y siempre dan que hablar... bien leo... y aclaro no soy fan de platano

en cuanto si caracas es la ciudad del miedo... en realidad no me importa, es la ciudad donde me gusta vivir con sus pro y sus contras, nada es perfecto... la pregunta seria: ¿que es perfecto? o ¿cual es la ciudad ideal para vivir? o ¿que hacemos de caracas para que sea una ciudad mejor?

¿tu haces algo para que caracas sea una ciudad mas segura, mas digna de vivir? en realidad no lo creo... ese es el problema de todos aca, se viven criticando, ¿y que pasa con la ciudad?

y en cuanto a ti demala_madre te dejo el telefono de mi spiquiatra que es buenisimo 2839475...

... y cuando escribas un critica sobre un tema, no hables sobre el cariño que le tienes a una pana que "ofendieron" unas personas x, habla con objetividad...

Anónimo dijo...

el pana de acá arriba está equivocado, nadie está hablando de si Caracas es la ciudad ideal para vivir, ni de cual es el mejor lugar del mundo para ello, tampoco el debate es sobre el comportamiento ciudadano y esa reflexión pendejística de "y qué haces tú para que sea mejor". La discusión trata sobre un reportaje que expone el problema de la inseguridad de la ciudad de Caracas, y de la forma en que está escrito como texto periodístico que es lo que no le gustó (y están en su derecho) a las personas que enviaron una carta. Tampoco el asunto según veo es evaluar los aciertos y desaciertos de un medio por que "apostaron a un proyecto y lo hicieron", porque bajo ese bobo argumento cualquier cosa pasa y entonces uno no pudiese criticar nada (Ej. El funcionamiento de la misión ribas es una mierda, pero eso no importa, "apostaron a ese proyecto y lo hiceron", y sus panfletos "están en la calle y dan que hablar"!!!), acá se está debatiendo sobre la calidad y estilo de un producto según el gusto de unos lectores y estoy de acuerdo con lo que se ha expuesto.

¿Qué es esto? dijo...

Quisiera agradecer a los anónimos que firman este blog por ayudarme a hacer una lectura más correcta sobre Caracas, Venezuela y el periodismo. Se me cae la cara de vergüenza. Con admiración. Leo Felipe Campos.

Juan Carlos: "no entiendo la crítica al estilo de escritura y enfoque en el tratamiento de un reportaje de Gatopardo".
Yo sí lo entiendo.

"...porque de ser así, deberíamos empezar a diseccionar cada ejemplar de Plátano Verde y regresar a sus redactores a la escuela de periodismo".
Esa es la idea, panita, que disecciones, si puedes.

Mariana R: "Del texto de Gatopardo, no lo leí, así que no opino!!!".
Solo pienso opinar sobre eso en este post. Del plátano que hablen quienes lo compran o lo leen, que no son los mismos.

Manola: "alguien dijo por allí que el reportaje de Gatopardo podía estar lleno de lugares comunes para los caraqueños. el problema es...".
El problema no es Caracas, Manola. Sino que, justamente, no es un reportaje. Es un artículo de opinión. Si a los amigos de Cinthya no les gustó la carta a Gatopardo, coño, otra vez, lo siento.

demalamadre dijo...

Al Anónimo de las 10:48am:
Te voy a decir algo con objetividad: te puedes ir, con tu psiquiatra y todo, bien largo al carajo.
Yo no estoy defendiendo el reportaje ni a su autora. De hecho, si supieras leer bien habrías visto que hasta tengo reparos sobre ese texto. Lo que estoy cuestionando es otra cosa que ni siquiera es, aclaro nuevamente, la calidad o falta de ella de Plátanoverde a la que aquí otras personas le han dado con todo. Ese no es mi peo: que ellos hagan la revista que quieran y que puedan hacer.

Y si vives en esta ciudad sin que te importen los 50 muertos de un fin de semana, entonces felicito a tu psiquiatra: el Prozac te está cayendo del carajo.

Cyn Rodríguez @CynMu dijo...

demalamadre, amigos, conocidos y otras especies

Cuando Gatopardo me pautó una crónica sobre la violencia en Caracas (porque eso fue lo que me pautaron, y no otra cosa), supuse que esto iba a pasar.
Y lo hice de todas maneras, porque
me parece que de esas cosas se encarga el periodismo, no de decir cosas bonitas. Para eso tenemos a la publicidad, gracias a Dios y a Coca Cola.
Nunca me propuse (ni me propondré) escribir sobre la totalidad de lo que es Caracas, porque creo que es muestra de una ingenuidad y una falta de perspectiva muy grandes pretender que una crónica (ese es el género de la "nota", para quienes tengan confusiones) totalice ni esta ni ninguna realidad.
Ningún producto periodístico que se precie y se comprenda tiene esas pretensiones.
Pero a lo mejor los muchachos del plátano han dado con el secreto. Ojalá nos lo cuenten algún día. Y ojalá el cuento venga en un formato que se entienda y se pueda leer.

Tajadas pintonas para todos

Anónimo dijo...

Malamadre: tienes un ojo del carajo para hacer arrechar a tus lectores. Ya te pasó con la pseudoantología aquella y con tu beatificación del tal Fleján. Mamaguevadas que te fascinan, pues. Lo que te diría ahora puede resultar salomónico: tienes y no tienes razón. Platanoverde es una soberbia cagada editorial: esa revista es más pavosa que una arepera con maitre. El problema es que el artículo de la Rodríguez es una plastota igual y puede que hasta peor. Yo lei ambas cosas ("cosas" no es un eufemismo, malasangroso") y la única conclusión que saco es que a los platanitos y a la Rodríguez les sale repetir, y con orejas de burro, periodismo de opnión I, II, II y hasta el infinito.

La cagada es colectiva, viejo.

¿Qué es esto? dijo...

Era mejor evitar el ataque y la explicación del género. Yo no estoy cazando cruzadas personales, Cynthia, igual me da que el texto estuviera firmado por otro desconocido o un anónimo. Desde hace 3 años para acá han salido al público Veintiuno, Clímax,
Zero y Marcapasos. Pronto vienen otras dos revistas: Contrabando y Dandy. Y al parecer ediciones binacionales de las colombianas Soho y Semana. Si no debatimos sobre el periodismo que hacemos, terminaremos cometiendo los mismos vicios de los periódicos nacionales, que juran que hablar mal del país es cagar a Chávez, y hablar bien es hacerle un favor al gobierno. Tronco e periodismo. Después sale un pendejo sin nombre a contarnos su versión del 27 de febrero del 89, o una ciudadana con miedo a confundir investigación con publicidad o gimnasia con magnesia. Hasta aquí llego en este blog. Saludos.

demalamadre dijo...

Parecía muy bien que las dos personas involucradas en el post se hubieran tomado la molestia de dejar sus comentarios aquí. Pero ya no. Al plátano Leo no le gustó que le aclararan cuál era el género del texto que tanto le molestó. Y supongo que terminó por irritarle que aparecieran tantos comentarios cuestionando la calidad de su revista.

Ahora dices que era mejor evitar el ataque. Pero prácticamente te limpias el culo con el trabajo de otra persona, intentas echarle paja y no te gusta que esa persona defienda su vaina porque eso te hace sentir víctima de una agresión.

Te aclaro que tú no estás debatiendo un carajo sobre el periodismo que se hace en Venezuela. Otro nombre tiene lo que haces. Y a juzgar por lo extraviadas que son tus concepciones sobre ese oficio, ahora hasta dudo que puedas participar en esa discusión que te parece tan urgente y necesaria. Pero ojalá me equivoque en eso.

Y te explico otra cosa: este blog no pretende pasar por periodismo: eso no es lo que hago. De modo que lo que haya dicho sobre el 27-F o sobre cualquier otro tema no es más que opinión. ¿Ves? Esto sí es opinión.

No te respondo lo de "pendejo" porque me da ladilla. No te arreches tanto que este post no tenía mala intención. Igual que tu carta: solamente pretendía debatir un poco.

Anónimo dijo...

Pero que shoucito más divertido. De las cosas feas que se entera uno por el intelnec. No se alteren muchachones que pronto viene el próximo número de platano, y todos los problemas que se están ventilando acá se van a resolver como le gusta a Leo Felipe: con un rumbita para celebrar con caña la vaina tan buena que es vivir en Caracas. Este ciudad y esta revista son dignas de bonche, de rasca perpetua. Yo creo que Leo lo que quería era que le dieran chance para escribir sus pavosadas en Gatopardo, y que le publicaran la foto de su blog en la página de colaboradores de la revista, para que las Chics Attack tuvieran una mejor excusa para jalarle bola o viceversa. Porque él, con apenas veintipico de añitos, ya se siente un consagrado del periodismo nacional, una referencia dentro del gremio, al igual que Chuchito y Chuchi.Ellos son los que nos van a salvar del barranco en el que está metido el periodismo nacional. Ellos que acaban de graduarse y de descubrir el mundo.Yo les recomendaría que dejaran la habladera de pistoladas y que se pusieran a investigar de una vez, para escribir cosas serias, reportajes de verdad. No las pendejadas que publican en platano. No los tonterías onanistas y egocentricas que desnudan en sus viajes por el tercer mundo. Lo que me da es risa. Se sienten como Kapuchinscky(como le dicen aquí) y lo que son es una pila de redactores frustrados del cuerpo de turismo de el nacional. Hasta Valentina Quintero les puede dar clases de croniquillas narcicistas aventureras de explorador aburguesado, asombrado por cualquier guevonada exótica que se consigue en el camino.
Para empezar con buen pie, por qué no se lanzan un dossier sobre el peo urbano que se armó en la Castellana desde que se abrió el mojón del Centro San Ignacio, donde quedan las oficinas de ustedes. Ese sí es un tema bonito, interesante y verificable científicamente. Los datos del impacto urbano están a la mano de cualquiera. Sólo tienen que buscarlos, procesarlos y ordernarlos en una buena crónica.Acude, los estamos esperando.

Anónimo dijo...

Una vez conocí a los chamos del Platonoverde: aquello es para coger palco. El fulano Campos es un subnormal con trazas de convertirse en algo peor. Jamás leeré ridiculces como las que ese pana pergueña en su revista. El otro, un tal Parra, parece un muñeco de ventríluoco sin dueño. Lo que colegí es que el contenido de platano hace honor a sus hacedores. Poned a dos monos titis a dirigir una revista y saldrá algo parecido a Platano verde. Zape

Anónimo dijo...

Nojoda, lo que sí está putamente claro es que a los de Plátano los odian más que a Marcel Granier: unos porque la revista es una cagada y otros porque la cagada son ellos mismos. Pura mierda.
EL INGENIERO

Anónimo dijo...

pensaba que lo más raro de este blog era encontrar a alguien que hace comentarios y utiliza mi nombre y mi apellido, los cuales, espero también sean los de él.

y resulta que ahora encuentro semejante pleito por una crónica y una carta. sobre plátano, me abstengo de opinar. ni la leo ni la veo. pero la nota de cynthia sí la leí y la verdad es que no comparto ni el contenido de la carta a gatopardo ni algunos de los comentarios negativos que leo aquí.

el gran problema con ese texto, ya lo mencionó alguien, es que no está hecho para caraqueños sencillamente porque todo lo que dice allí lo sabemos y lo leemos todos los días. esa es una lectura para extranjeros. y quizás ni tan extranjeros porque esa es la visión que tienen muchos en el interior del país.

lo mismo puede decir un carioca sobre río, la ciudad maravillosa que en realidad está plagada de pobreza, delincuencia y marginalidad. si alguien escribe para extranjeros sobre esos problemas, más de uno se molestará.

o sobre la misma santa cruz de bolivia. en la edición donde escribe cyn, también hay un texto sobre esa región. ¿algún cruceño habrá mandado cartas a gatopardo?

el enfoque de la queja es errado porque cuestiona el tema. como lo aclara la misma cyn, no se puede pretender en un reportaje o una crónica contener la totalidad ni las distintas caras de una ciudad. esa es una verdad elemental. y hasta difícil es lograr algo parecido en un reportaje sobre un tema puntual. pero uno trata.
om

Anónimo dijo...

Verga...si algo quedó claro es que Bananín y Bananón deben hacer acto de contrición y dejar de publicar esa mierda de revista para diseñadores trasnochados que sacan.

panas, reflexionen...piensen antes de hablar y mucho más antes de escribir, miren que el plátano muére por la boca.

Anónimo dijo...

La callapa colectiva enratona. ¿Acaso Plátanoverde no tiene quién lo defienda?

Unknown dijo...

por no dejar, me asomé en el blog de leo campos y, pues sí, allí estaba la descarga original contra la crónica (que no reportaje ni artículo de opinión según nos desdijo la propia autora) del enorme lado podrido de caracas que, para el bloguero leo campos, es la "caracas de cynthia y gatopardo".
lo curioso es que encuentro algunas asimetrías entre el poder de convocatoria de lo que escribe leo y de las cosas que critica.
por ejemplo, el tiraje de gatopardo debe ser de seis cifras mientras que el de plátano llegará, a duras penas, a cuatro cifras, y bajas. y en los blogs no parece irle mejor: mientras que demalamadre (que para campos es el sujeto anónimo que habla del 27F)ya roza los 30 comentarios, en aquel post sólo hay dos comentarios, de los cuales uno es del propio leo, lo que reduce el feedback a un solo lector: un jrd que pretende ser irónico pero que, a la vez, se autodefine como perpetuo excluido y se deja intuir como chavista tácito.

de qué será ese verde, plátanoverde...

Anónimo dijo...

Y si profundizas aún más tus "por no dejar", Manola, encontrarás que ese JRD no es sino el periodista José Roberto Duque, cuyo blog es tan visitado como el del joven Campos a quien aplaude por abuchear a periodistas como Cynthia y ese gusto escuálido por pajear la revolución y sus tiempos.

Anónimo dijo...

Por fin una jeva que sabe contar. los jodiste, mamita.

¿Y ese Duque quién es? Yo tenía un perro que se llamaba Duque.

EL INGENIERO

Anónimo dijo...

Reconozco que el comentario que hizo en el blog de Leo no es su mejor producción intelectual pero no debemos olvidar que José Roberto es un gran periodista. No es justo atacarlo por sus preferencias ideológicas. Debemos respetarnos y tolerarnos todos.

Anónimo dijo...

Soy el mismo anónimo de arriba. Parte de mi comentario anterior era para el Ingeniero, para que sepa quién es ese Duque que irrespetuosamente compara con su perro.

Anónimo dijo...

gracias, sonny. tienes razón.

Anónimo dijo...

Nada más lejano a mí que defender a El Ingeniero, para quien las mujeres son jevas, pero comparar a una persona con nuestro perro no necesariamente habla mal del comparado. Un perro que se llame Duque debe ser querible. En el caso del Duque en cuestión, José Roberto, el comentario escrito por el periodista contra el reportaje de Cynthia Rodríguez en Gatopardo refleja la característica que el anónimo tanto crítica: absoluta intolerancia política.

Anónimo dijo...

Mi perro era de pinga. El ofendido es mi perro, anónimo
EL INGENIERO

Anónimo dijo...

Hola, me llamo Daniela Martínez y apenas voy a cumplir 25, espero que el señor que escribe a la media noche no me vaya a atacar por eso, a mi si me gusta plátano verde, es verdad que su diseño es fastidioso en ocasiones pero hay artículos que valen la pena leer y que no consigo en otras revistas, como uno del cementerio, uno del bulevar de sabana grande (creo que esos los escribió el plátano Leo) y uno de la música evangélica (ese es de una muchacha, Jessica ), son buenos. También algunos cuentos (como uno de Fernando Iwasaki) y entrevistas a artistas y musicos. Supongo que me van a decir que soy una fan, y la verdad es que no tanto, pero he leído aquí palabras que son dignas de rabia o envidia, no creo que sirvan para discutir lo que quieren los dueños del blog que hicieron el comentario. Lamentablemente no puedo opinar sobre el artículo de la señora Cinthya porque no me lo leí completo y lo que sale en el blog de Leo es muy corto para sacar conclusiones. Si no conocen la obra de José Roberto Duque, imagínense... Y a la señora Manola, no creo que el poder de convocatoria sea lo más importante. Si bien mi comentario es como el número 30 en este artículo, lo que no habla nada mal del rating que les dieron los plátanos a demalamadre. Gracias. Daniela.

Anónimo dijo...

Está bien que te guste la revista pero eso que digas que Plátano le dio rating a Malamadre habla muy mal de tu percepción. Es al revés. Ya lo dijimos antes: tiene un ojo del carajo para hacer arrechar a sus lectores y ponerlos a escribir pendejadas en su blog.
Malamadre, a ver si cambias el post, porque ya el caso de bananas en pijama está ladilla.

JRD dijo...

Siempre me ha arrechado una cosa (al menos una) de los intelectuales y demás prohombres, de esos que se creen importantes sólo porque tienen una columna en El Nacional: creen que su intelecto es demasiado elevado como para rebajarse a discutir con gentes que no sean de su "nivel". A uno de ellos lo oí decir o insinuar que no discute con muchachos ni con güevones. Sí, Tulio Hernández nunca se embarrará en una polémica de, entre y para muchachos. Y bueno, humildemente, yo sí discuto con muchachos y con güevones. Voy contigo, demalamadre.

Nada más para decirte que opinar y polemizar es bueno, es importante, es necesario y por lo general es sabroso. Pero cuando uno, para ponerle "altura" a una polémica, quiere pasar por sabio o conocedor de una meteria (el periodismo, por ejemplo) debe cuidarse de decir mamagüevadas como esa de que un reportaje es un calificativo. Tercer párrafo de tu artículo de opinión (post, como lo llaman en la bloguería).

Y bueno, sigan echándole candela a esto. Y sigan ignorando que según Cinthya había 600 familias viviendo debajo del Viaducto, y que en Caracas los carros vuelan por encima de los puentes. Ignórenlo. Si se fijan en eso se convierten en chavistas.

Anónimo dijo...

Malamadre: El Chatwin de La Cañada te mostró el chuzo, canalla. Me parece que no vas a tener cojones para una repliquita. Ese tipo es malandro (de Carora, pero malandro al fin).

SapoCrudo

demalamadre dijo...

A ver JRD: me parece que te confundes, o que padeces ceguera ideológica o no sé qué carajos.

La mamagüevada que me atribuyes, no la veo por ningún lado. Yo no he dicho que un reportaje es un calificativo. He dicho, lee bien porque ya me está ladillando esto, que un reportaje no puede pretender abarcar la TOTALIDAD ni TODOS los matices de una ciudad. Y menos una compleja como Caracas.

He dicho que la crónica esa se enfocó en un aspecto inocultable que es la violencia que se vive en Caracas. Y es inocultable por más que VTV y Telesur se empeñen en hacerse los locos con eso. Y es válido y lógico que una crónica de una revista se ocupe de cosas específicas.

Y no, no soy un experto en periodismo ni un sabio que no discute con mamaguevos: a fin de cuentas, te estoy respondiendo.

El texto de Gatopardo puede tener todas las fallas que quieras atribuirle desde tu posición, pero la carta que mandaron a la revista no cuestiona el trabajo periodístico, sino que deja en claro que lo que molesta es la visión o el flanco que se muestra de la ciudad. Y peor aún: que el texto se centre en ese aspecto de Caracas. En esa realidad, no lo olvides.

Y hablando de mamagüevadas, tú, sabio del periodismo, afirmas en el blog de leo felipe una vaina aún más descabellada: que lo que pasa es que Cynthia quiere joder a Chávez diciendo que Caracas es una mierda porque ella está arrecha ante el hecho de que al fin ustedes -te incluyes- los sufridos ahora están en el poder.

Es verdad que eso de la gente viviendo debajo del viaducto y que los carros vuelan es una vaina extraña. Pero la carta que se envió a Gatopardo, otra vez, no hablaba de esas posibles falencias.

Así que déjate de güevonadas.

Anónimo dijo...

¡Ay, qué miedo, salió un malandro de blog a asustarnos a todos! A defende a sus muchachitos, que trabajan el San Ignacio, pero son amg¡Cuánta tontería por culpa de un necio que se cree Jerjes! En fin, JRD, anda a asustar a los pajaritos de tu abuela.

Les pongo aquí es como Leo Campos se define en la vida para todos sus lectores de Plátano Verde en la WEB:

"_Leo Felipe Campos.Escritor. Nace el 21 de octubre de 1979. Tras salir de Puerto Ordaz y dar un paso rasante por distintos medios masivos venezolanos, Leo Felipe Campos se ha encargado de la jefatura de redacción de la revista plátanoverde desde su fundación. Su trabajo periodístico ha estado siempre ligado a la inmersión y la investigación de alto riesgo. Últimamente sólo se le consigue en bares y es conocido como el Mickey Rourke del periodismo venezolano. Dice que trabaja en un libro de ficción.
leo@platanoverde.com"

ESCRITOR, okey, ESCRITOR es el muchacho, perrito faldero de JRD.

Anónimo dijo...

eu

Anónimo dijo...

Malamadre: Me intriga una vaina. ¿De qué carajo vive un tipo como JRD? Que yo sepa ese tipo, para empezar, no es periodista; estudió Historia, creo. Segundo: lo botaron de cuanto periódico balurdo intentó reportear. Tercero: no creo que nadie pueda vivir de una cagada de libro llamado "Salsa y control", que por cierto, le dieron durísimo en un cuento de la famosa pseudoantología de López Ortega. Cuarto: ¿pertenecerá a la nómina de la Misión Plátano?
Ahí te dejo esas interrogantes, Malamae

Saludos

Fricasé.

Anónimo dijo...

‘...se lanzan puteadas de lo lindo. Sin miramientos ni consideraciones. Estamos hartos de algunas cosas, vamos al cine, consumimos música y pretendemos circular por la calle de la buena vida’.
Me encanta tu carta de presentación, aunque “Secuestro Express”, me pareció mal como película, no como denuncia de una situación aterradora, innegable para nosotros que ya no podemos caminar ni aun en una noche temprana. Esa película pretende sacarle provecho a unos efectos especiales usados por los comerciales, por cuñas ya sobrepasadas en países del primer mundo. Cuando vi aquella peli, lo que se me vino fueron imágenes que presentaban situaciones terroríficas en otros films que se enfocaban en mostrar un suceso mas grave aun de lo que parece a la vista de todos. Lo que no se ve. Cuando la mujer secuestrada está a solas con uno de los maleantes, fílmicamente aquella secuencia es muy pobre. Allí hubiera podido explotar el autor esa situación tan nuestra ahora, pero lo que hizo fue poner hablar a los tipos dando cada uno sus pobres razones.
Yo imaginaba que un Secuestro Express era mucho peor. Consumo mucho cine y TV, digo cable. La sensación de asfixia, de pánico de un mafioso como Tony Soprano, tu me dirás si no es mas contundente que ese Express.

Anónimo dijo...

qué cagada, el amigui de cinthya está arrecho y no sabe cómo sacarse la espina de lo mal que están hablando de su trabajo en la caracas del terror. cuidado, puede ser peligroso que ventilen tanto odio en una página web, a lo mejor los matan. o los secuestran. miren que esto es tan peligroso que ya no se puede salir ni de noche temprano. fantasmas.

Anónimo dijo...

Yo soy la anónima de las 10:53am, la que te antecede. Soy la de la noche temprana, la verdad es que me diste una risa, porque tu comentario es inentendible, al menos para mi. No leí ninguno de los artículos, sólo me refería a la película, de la que yo, no he hablado con nadie. Y a decir verdad las calamidades en torno a los artículos esos, parece cansona. No sólo por eso, pero me encanta la frase De mala madre : ...estamos hartos de algunas cosas.
De cualquier manera, De mala madre, si no lo quieres cambiar aun, no lo cambies, me encanta tu irreverencia.

Anónimo dijo...

¡Ahora sí se subió la gata a la batea! Un "alternativo"como ahora se llaman los criptochavistas (anónimo 6.23), dándoselas de irónico.
Saludos a la comeflor que le sigue, hace falta en este blog un poco de energía positiva.

Anónimo dijo...

Victoria,
Di el concepto de come florismo, espero que sea mejor que el yo manejo. Que no sea una respuesta fácil, sino contundente. Dilo. A ver si no estas, simplemente repitiendo estupideces.

Anónimo dijo...

Creo que la frase en mi post "energía positiva" define lo que para mí es un comeflor, pero a pesar de ser emplazada de una manera algo grosera a definirla "contundemente" para ver "si repito estupideces" acepto el reto y me las juego al profesor Márquez Rodriguez para tratar de definir el comeflorismo.
No sé si será su origen, pero la primera vez en oír el término "Comeflor" fue en un sketch del Show de Joselo donde el actor Alejandro Corona era un comeflor: un vegetariano de buena vibra incapaz de generar violencia. Los recuerdos son difusos, el personaje era como un resabio de hippie, flaco, pálido y débil por la falta de proteinas. Como era muy chama, no sabría decir si su comeflorismo tendría algún doble sentido con el uso de la entonces llamada "mafafa". Lo que si recuerdo es que representaba paz y amor.
El sketch pasó pero el término Comeflor quedó, para mí no es un adjetivo descalificativo pensarlo como aquellas almas positivas que son contrarias a cualquier tipo de violencia, no sólo física sino también verbal. Aquellos que a todo le buscan una buena vibra.
En estos tiempos de a toque para los extremos más radicales de ambos lados de la barrera política, ser Comeflor es peyorativo, no vivimos tiempos de paz y amor.
Como no es un término que se compra en bótica, ni que definen en Wikipedia, ni siquiera en el Diccionario del Habla Actual de Rocío Nuñez y Francisco Javier Pérez, no repito estupideces, las estupideces aquí emitidas, son mías solitas.

Anónimo dijo...

No estas tan perdida, Victoria, pero no fijarse que lo que me gusta es la expresión de Mala Madre ‘estamos hartos de tantas cosas’ , para nada come flor, por cierto, te dio un perfil bastante bobo. Aquí te va mi concepto que por su puesto no es de ningún diccionario, es de la vida hipócrita.
Un come flor es aquel que va pasando por la vereda con su pareja, recoge la hoja de un árbol y le dice a su pareja, toma mi amor, mira lo que la naturaleza ha hecho durante millones de años especialmente para ti. (que me digan come flor o estúpida es igual de ofensivo, no tiene nada de malo, pero es ofensivo, y estando en esta página más).

demalamadre dijo...

A la reverga! Aquí se pelean por todo. Cosa más grande. Sólo quiero dejar claras un par de vainas: no tengo peo con Leo ni con plátano, cada uno en lo suyo. Lo que hice fue comentar algo que me pareció una gran meada fuera del perol. Y sorprende que esto se haya llenado de comentarios en su contra por cosas que van más allá de la famosa cartica.

Tampoco sé, Fricasé, de qué vive JRD, pero no me cuadran tus apreciaciones sobre sus trabajos: el tipo escribe del carajo. Lo demás es política. Ya te responderá él de qué vive si es que le sale del forro hacerlo.

Y en cuanto al anónimo jodedorcito: ni soy "el amigui" de Cynthia, ni "el amigui" de JRD, ni "el amigui" de Leo, ni "el amigui" del coñodetumadre ni de nadie.

Y para la no tan Guanipa: el concepto de comeflor es correcto, pero el personaje de Joselo era "el come nabo".

Anónimo dijo...

Malamadre: Tú me puedes explicar qué significa "escribir del carajo". Si JRD escibiera del "carajo" ya Herralde le hubiera publicado sus cagadas. Ese tipo tiene que pagarse sus cosas "del carajo" en Comala a falta de un visionario que se dé cuenta de que el tipo escribe "del carajo".
Anda pal "carajo", Malamadre.

Anónimo dijo...

A juzgar por la foto de JRD, el tipo como que es barman. Pero me late que también lo van a botar de ese botiquín por beberse toda la caña del local.

Anónimo dijo...

Lamento haber confundido a la Anónimo con una Comeflor, no sólo no lo es, sino que además lo considera una ofensa. El subrayar "estamos hartos de todo" tampoco la convierte en una chica mala, da más bien la impresión que es una de esas niñas recién salidas de un colegio de monjas que quisiera ser tan “cool” como mala madre, pero está en otra liga. Una Britney Spears queriendo ser Courtney Love.
Mala madre tiene razón, el origen de la palabra comeflor es errado, confundí comenabo con comeflor, mi memoria no es de las mejores, pero el concepto de comeflor se confirma: quien busca la energía positiva. No veo cómo alguien se puede ofender por eso. A menos que Britney Spears demuestre que el comeflorismo, como ella asegura, está relacionado con la estupidez y la cursilería.
Por cierto de mala madre, al contrario de lo que opinan los anónimos, me gustó la defensa a JRD, espero que no te ofendas si te digo, se te salió el comeflor (es una halago no una ironía).

Anónimo dijo...

No eres buena para adivinar. Y tu sobre nombre Victoria ¿Abril?, Victoria ¿de los Ángeles?, es come flor lo suficiente. Además no es ‘hartos de todo’, sino ‘hartos de algunas cosas’, por ejemplo explicarte el chiste.

Anónimo dijo...

¡mierda!!!! este platano esta muy largo y se lo gozaron en grupo. a otra cosa mariposa, consigan a otro onanista con espejo para aplicarsela. 55 comentarios. Este coño va a terminar cobrando.

JRD dijo...

tercer párrafo del "post":
Cuando Jesús Ernesto Parra y Leo Felipe Campos terminaron de leer el reportaje –aunque ellos dicen que no merece el calificativo...

Sí lo escribiste. Ten el valor de reconocerlo. Total, nadie te lo va a reclamar en tu cara, ya que no tienes cara sino un seudónimo y docenas de posibilidades para llenar esto de notas "anónimas".

Ahora copia y pega aquí el texto donde dije "Cynthia quiere joder a Chávez" o trágate los 35 comentarios de tu autoría escritos aquí bajo anonimato.

Y no te arreches que te estoy dando raiting.

Anónimo dijo...

Duque, pana, decídase. O eres escritor o eres mamaguevo. Haz una vaina mejor que "Salsa y control" u otro de esos plagios que haces de Villoro. Ya la gente te tiene pillao. En este país hay veinte guevones que leen. Tú no engañas a nadie. Salud.

El Isiro

Anónimo dijo...

http://www.panamericanismo.org/images/debate.jpg

Unknown dijo...

a josé roberto lo conozco desde que escribía crónicas rojas en el nacional (también tú tenías tu espacio en el nacional, jrd, y por cierto, también pasaste por el universal aunque sin gloria) y era el mejor escribiendo historias de sucesos. y sí, sí escribía genial como dice bichodeuña. ahora sigue escribiendo en rojo, pero ya no es el mejor de nada.

demalamadre dijo...

JRD: Hay que ser ocioso. O tener muchas ganas de joder. Esa vaina de "calificativo" es un exceso de preciosismo en el uso del idioma que no le luce mucho a un tipo en cuya prosa abundan palabras como "mamagüevada".

Me parece, mi estimado, que queda muy, pero muy claro, que me refiero a que a los panitas del plátano no les parece que el texto ese -que ya me tiene los cojones hinchados- deba considerarse un reportaje. Es decir, así hablamos, así se entiende, uso coloquial de la lengua. Dispense usted, señor, si alguna falta cometí.

La frase "Cynthia quiere joder a Chávez", por supuesto que no la escribiste tal cual, pero es una de las ideas centrales de tu comentario en el blog de Leo:

"...el ataque de la cronista no es contra Caracas sino contra Chávez y el chavismo".

Me parece que eso puede traducirse sin riesgo de falsear la idea en: "ella quiere joder a Chávez".

Y luego, en un segundo post, dices: "No es un artículo de opinión: ella odia a los chavistas y Caracas le importa un coño, porque no la conoce".

Refuerzas el asunto.

Te aclaro otra vaina: no he tenido, de momento, que recurrir a la invención de anónimos ni para decir las cosas, ni para mandar a alguien al carajo viejo, ni para causar la impresión de tener un blog muy visitado. No me hace falta. Al menos, por ahora... valga el parafraseo.

Gracias por el rating, no sé que hubiera sido de este blog sin tu presencia: nunca cambies, gracias por existir... Pero no me hagas perder más tiempo con güevonadas como esas.

John Narváez dijo...

Un choque de botellas por el Duque y unos tiros al aire por Salsa y control, el mejor libro de relatos de la literatura venezolana.

Anónimo dijo...

De Mala Madre: ¿Cómo es eso que no recurres a anónimos? ¿Y Demalamadre qué coño es? ¿Tu nombre de bautizo?

Anónimo dijo...

Nieto Echarri: anda al mismísimo coñísimo de tu madre: "Salsa y control" el mejor libro de relatos de este país: No me jodas, pana.
Existe algo llamado "Las primeras hojas de la noche", cómprelo y vea lo que es el mejor libro de relatos de este país.

Malamadre: cómo dejas pasar ese strike, no parecen vainas suyas.

SapoCrudo

demalamadre dijo...

Anónimo de las 6:18: Hay que ser tarado. Por favor, antes de escribir algo lee, piensa, procesa lo que lees: me refiero a que no tengo que inventarme COMENTARIOS anónimos para abultar esto. En todo caso tu "pendejez" lo confirma: no iba yo a inventarme un comentario como el tuyo...

Sapo: no opino sobre Salsa y Control porque no he tenido el honor de leerlo. Conozco el otro, el del boxeador, y ese me gustó.

Anónimo dijo...

Esto, no ha terminado aun. Como se trata de periodismo, no creo que en un país como el actual donde estan confronadas las palabras libres esto termine en corto tiempo.
Soy, nada mas que una metiche, no soy un personaje inventado por lamalamare.

Anónimo dijo...

De Mala Madre y demás participantes, putos y jevas: Gracias a sus abundantes comentarios ya sé quién coño es Duque. Concluyo que el carajo es periodista y no historiador, chavista de bolas, que a veces es un gran genio y otras una gran mierda, que lo odian pero menos que a los putos Plátanos del San Ignacio, que tengo que leerme ésa vaina de Salsa y Control (¿alguien sabe dónde comprarla?), que está claro que es un picado y un echón del coñoelamadre y que cada vez quiero más a mi perro.
Victoria No Guanipa, si quieres te invito un nabo.
EL INGENIERO

egoernesto dijo...

Anónimo, demalamadre, como sea:


Me tomo el tiempo de responder a las bravuconadas que tú y tus "almas gemelas" prodigan en este diario esquizofrénico. Es divertido esto de leer tu poética de anónimos guapetones de blog.

Decía Wilde: "Como no fue genial, no tuvo enemigos". Y nada más lejos de la realidad. Anónimo, tienes muchos amigos aunque nadie -dices tú- sabe quien eres. Aunque en ánimo de rebatirme, y uniéndome a la galopante contradicción que puebla este sitio web, cito -Anónimo- tus obras célebres: Las Mil y Una Noches, El Corán, La Biblia, el Poema de Gilgamesh, y el Código Orgánico Procesal Penal.

Es cierto, eso que tú y tu legión de fantasmas se empeña en hacernos saber: Anónimo eres una eminencia.

Miremos tu texto y las verdades que nos dejas saber.

Para la antología: "deberían saber que los reportajes también tienen el derecho de enfocarse en aspectos muy precisos y determinados de temas o realidades más amplias y complejas"

¿Alguién puede explicar a que se refiere? ¿Los reportajes tienen derechos? ¿Estará hablando anónimo de investigación o algo así?¿ Con argumentos como este demalamdre, anónimos, y sus almas gemelas pretende hacer cátedra y refrendar sus tesis?

Otra: " ya hay cosas que leer, pero la mayoría son “textos”, no me atrevo a calificar a más de uno o dos de “reportajes”".

Y la mejor, una elipsis para reforzar el subtexto paranoide este sitio: "Así que dejen la sensibilidad “rangeliana”, porque resulta que así son las cosas aquí. Aunque eso duela. Y aunque de vergüenza que en otros países lean semejantes vainas de tu ciudad."


Sin contar en la parte en que hablas del sueño de escribir en Gatopardo. Y desde allí comienzo, para contarte que esa carta es resultado de una charla con la gente de Gatoparodo - en Guadalajara- donde se habló del periodismo venezolano y ese triste ejemplo que es La Capital del Miedo. Y creéme que mi opinión -la que calificas, en tu juego favorito de señalar desde la cobardía, de rangeliana- era las más ponderada y generosa de esa conversa. Entiéndelo, si aun no sales de tu casa: fuera de Venezuela el periodismo venezolano - ese que tu defiendes y que según se aprende en las universidades -no da lástima.

Les da risa.

Y tienes razón, da verguenza que hablen de tu gremio en esos términos y que nadie de la cara. Porque nadie lo ha hecho hasta ahora. Y nadie debate para preferir comentarios aldeanos como los tuyos y los de tus almas gemelas

Aunque digas que nosotros no hacemos reportajes sino textos.

Aunque digas que es en la academia que se aprende periodismo.

Aunque digas que solo los reportajes son periodismo.

Aunque digas que los periodistas tienen derecho a decir lo que les de la gana.

Aunque digas que hacer zapping en globovisión es hacer crónica.

Aunque digas que condenar el mal periodismo es ser chavista y resentido.

Aunque digas toda esa basura que no te atraves a firmar con tu nombre.



Sobre La Capital del Miedo ya lo dijiste, es una mierda.

Anónimo dijo...

Mas que exaltado, estas meando fuera del perol. Aquí nadie ha pretendido hacer cátedra ni refrendar sus tesis. ¿nunca has estado en una fiesta a las tres de la mañana? (bueno la verdad es ahora es mas difícil) No por eso la vas a calificar de esquiozoide. O si quieres, si. Yo, no sé, si soy alma gemela de malamadre, (me encantaría, pero no creo) de lo que si estoy con él, es que, a pesar de que con todas las penurias que el mundo convive, uno pretende, pretende, caminar por las calles de la buena vida.

Anónimo dijo...

egoernesto, ya que sabes tanto de gatopardo dime entonces por qué, si el reportaje, crónica o lo que sea les pareció una cagada, lo publicaron.
eso es falta de editor. y que conste que no son editores del periodismo venezolano que "da risa".
¿y plátanoverde no les da risa? ¿o no te lo dijeron?

demalamadre dijo...

Así que "egoernesto" se presentó aquí a hacer poemitas.

Mira mi niño, acepto mi falta en la frase que citas. Reconozco humildemente que debí decir de otra manera lo que bien se entiende de esa. Le falté al idioma.

Me refiero, para que quede claro, a que los reportajes o las crónicas o las investigaciones no necesariamente tienen que pretender abarcar todas las lecturas o dimensiones de una ciudad. A menos que le eches bola con un libro.

Me alegra que hayas ido a Guadalajara, que conozcas el mundo. Pero me importa un carajo si fue allá o en el corazón de lo que alguna vez fue la poderosa Tenochtitlán donde te alcanzó la iluminación.

Si hablaste de periodismo con alguien de Gatopardo, bien por ti. Supongo que debió haber sido una discusión interesante. Pero en la cartica que enviaron ustedes no hablan de la necesidad de hacer buen o mal periodismo, ni ponderan las virtudes o defectos en ese sentido del trabajo que tanto les molestó y que -según tú- tanto desagradó a los mismos editores que -ay, qué cosas- lo publicaron.

A lo que me he referido siempre es al contenido de la puta cartica: a que lo que hacen allí es quejarse porque alguien escribió puras cosas feas de Caracas y no incluyó, entre muerto y muerto, alguna vaina bonita.

Si lo que te preocupa es la calidad del periodismo local, no lo reflejas en esas líneas. Lo siento por tus buenas intenciones.

Por lo demás, no estoy defendiendo al periodismo ni a nadie en particular. Discutan ustedes sobre su oficio. Y ojalá de verdad la salvación del periodismo que se hace en este país esté en tus manos y que tus comentarios cosmopolitas sirvan a tan loable propósito.

Para cerrar: todos tus versitos que comienzan con "aunque digas", me parece que se refieren a cosas que no he dicho yo. No sé si algunas sí: en este momento ya me ladilla releerte y releerme. Pero creo que la mayoría de esas vainas las escribieron aquí otras personas. Aunque tú, egoernesto, no lo creas.

Anónimo dijo...

setenta comentarios perdidos. ustedes: anónimos diversos, plátanos, cynthias y demalamadres, definitivamente no tienen nada nuevo qué decir. rajá.

Unknown dijo...

corrige, belisario: 71 comentarios perdidos. o 72, con éste.

Anónimo dijo...

Y yo que andaba buscando información sobre Leo Campos me encuentro con esta maravilla! Me parece importante esta discusión porque no sé si se han dado cuenta de que bajo esa maraña de referencias personales están hablando del periodismo en Venezuela. Esta es una discusión necesaria poirque el periodismo en nuestro país se ha convertido en un oficio prostituido. Lo que no entiendo es por qué se tiran a matar, como si unos tuvieran derecho a existir y otros no. La mayoría de los comentarios rezuma intolerancia y mezquindad hacia el trabajo de los demás. ¿No pueden discutir puntos de vista sin insultarse? La argumentación consiste en eso, discutir pero con razones. Cuando veo estas cosas me convenzo de que los venezolanos tenemos la autoestima por el piso ya somos incapaces de ver nuestros puntos positivos, que los tenemos. Ahora se trata de hacer un periodismo independiente, crítico, creativo, comprometido. No puede ser ese un punto de partida?

Anónimo dijo...

Sr. de mala madre, me gustaría que por favor me dijera su nombre, apellido y a qué se dedica. ¿Por qué ocultar cobardemente su identidad si en su texto habla tan libremente de los demás con sus nombres y apellidos? ¿no cree que eso le quita un poco de credibilidad y respeto? además, así es muy fácil hablar de los demás, sobre todo hablar mal. ¿No será que quisiera publicar en Platanoverde, Gatopardo u otra revista con las que seguro usted sí sueña y le da miedo que sepamos su nombre para no ser rechazado por hablador de tonterías?
Seguramente, como todos imaginamos, no se atreverá a decir su nombre y apellido, pero al menos una explicación de la razón, o razones, por la cual se oculta creo que lo dejaría un poquito mejor plantado.
Mis respetos por su forma de escribir, me gusta, pero no sea cobarde y cómodo y de la cara y afronte sus ideas de frente.

demalamadre dijo...

Señor Osorno, si es que acaso es usted el verdadero, el mismo gordito de la foto en los editoriales de Gatopardo y no uno de los imbéciles que anda saboteando este blog, pues le agradezco -y hasta me honra- que se haya tomado unos minutos de su ocupadísima vida de multieditor para escribir un comentario...

Lo que no le agradezco es el ataque gratuito: se puede ir usted al carajo, o a chingar bien lejos para que nos entendamos en chilango.

Lo único que le acepto es que me llame cómodo: eso soy y así seguiré. Como el fotógrafo ese que usted sacó en su revista -y salvando las distancias porque ese señor me parece un grande-, no me interesa que se sepa quién soy, por distintos motivos.

Sólo le cuento uno: no me da la perra gana.

Le cuento otro: este es un experimento sobre la expresión bajo anonimato: ni yo doy identidad ni le exijo identidad a quienes comentan. Ni censuro.

Me parece curioso que usted haga un comentario aquí. Pero -de nuevo-si es usted, pierde su tiempo si se molestó por el tema de platanoverde: me importa un carajo esa revista, no es para mi, y si no entendió el post, se lo explico: lo que le critiqué a sus amiguitos no es la revista que hacen sino la terrible falta de tino de la cartica que le mandaron a Gatopardo. No sólo porque le echaron paja a alguien -que es lo de menos- sino porque lo hicieron argumentando necedades: les molestó que se dijera una de las tantas verdades de Caracas y que no se dijeran las vainas que a ellos les hubiera gustado ver en un catálogo de turismo: Caracas bellísima... Más de 12 mil personas fueron asesinadas en el país el año pasado y a estos muchachos les perturba que se lean cosas feas de su ciudad.

Y de paso, dejan como una sarta de pendejos a la gente de su equipo editorial que, según ellos, se dejaron meter un artículo de opinión como si se tratara de un reportaje. O una crónica. O lo que sea.

Hasta aquí mis explicaciones. Ya estoy harto de este post, de los ataques gratuitos que desencadenó contra los muchachos de plátano, de las habladeras de guevonadas y de las vainas locas que se trae la gente en la cabeza.

Al verdadero Osorno, mis respetos, condicionados por lo que ya le dije: hablador de tonterías será su abuela, como dirían en El Chavo.
Si es un falso Osorno: el coñoetumadre.

Anónimo dijo...

JAJAJA! huevonsote, por supuesto que era un falso Guillermo Osorno, ¿crees que ese tipo se va a interesar en un pelagato como tú? a medias lo creiste, y hasta te debes haber emocionado.
"Sólo le cuento uno: no me da la perra gana." - pobre respuesta mediocre, no se podía esperar más de tí, estuviste a la altura de lo que eres: un cobarde, y mediocre claro está.

Unknown dijo...

Oye, Demalamadre, te escribe Boris Muñoz oriundo de Caracas. Para no dejarte dudas de mi identidad, fui criado en Las Mercedes de antes y escribí un librito junto con José Roberto Duque -mas no revueltos. Quizás nos conocemos pero eso es lo de menos. Solo quiero preguntarte, dado el tráfico pesado de tu blog, cuál es el promedio de horas que le dedicas a tus posts. Es para un trabajo sobre el blogueo que pienso hacer. Si no quieres hacer pública esta información, mándame un correo para comunicarme contigo directamente.

Saludos,
Boris

demalamadre dijo...

Boris, oriundo de Caracas, mándame un mail a demalamadre@gmail.com y respondo tus preguntas

Anónimo dijo...

Estuve leyendo, ni recuerdo por cual razón, los comentarios pasados, referidos a la violencia en Caracas. Hablar de las fulanas "notas" en Gatopardo y en Platano Verde, a estas alturas me parece una tontería. Sin embargo, me causaron gracia algunas cosas, definitivamente a la gente del "plátano" las criticas le pican y duro. Para terminar, luego del ejercicio onanista que significó el proyecto "por el medio de la calle", ahora los "emplatanados" quieren fotos, videos, etc. ¿Entonces muchachones para que tanto artista y creador invitado si al final hay que martillar fotos a los simples mortales? ¿No son ustedes un proyecto de una de las postproductoras mas grandes del país? Se les acabaron los "casetes" de video o no pudieron hacer una fotito decente. No sean vivos y paguen por esas imágenes. Por cierto, ya se estan poniendo fastidiosos con su discurso anti comercial, contra cultural y sobretodo anti mercadeo ¿no les da pena? Cierren esa oficina en el Centro San Ignacio y escriban un libro, se puede llamar NO LOGO. Nos quedamos con ganas de recoger basura en Petare, seguro es más abundante que en Chacao

Anónimo dijo...

Lo que nunca me ha olido bien de quienes pretenden calificativos como "intelectual" o "escritor" (y ahora cierta raza de bloggers) es esta pulsión (muchas veces pretensión) de querer tener la última palabra. Dicen que les interesa la discusión, pero siempre me encuentro con el mismo límite: echan mano de cierto ingenio, o de cierto efectismo lingüístico, para imponerse con una frase o un rodeo más lapidario que el de su "interlocutor".

Esta especie de mal olor se mezcla con otro: que para llamar la atención, para atraer, dependen de cierto "arquetipo" (me cae mal esta palabra, pero no se me ocurre otra, ando a la carrera) bien venezolano (creo que es una palabra setentoza, no estoy seguro) del "revirón". Quien suscribe este blogg bajo el anonimato, por ejemplo. Los del Plátano, también. Y el mejor de todos, el "jefe espiritual" (hegelianamente hablando) de todos uds: el más revirón de todos, Chávez, que está llevando al país a la miseria en todos los aspectos, quien ya tiene al país en una guerra civil blanda. Es como si no encontraran otra manera de afectar (ni de afectarse) que no sea revirando. Chavistas, creo, son tanto los que hablan y contestan como él, como los que creen ingenua o interesadamente en los delirios del presidente.

Ya en otro registro, este blogg no escapa a esta suerte de "vanguardia latinoamericana" que viene sustituyendo al "realismo mágico" desde mucho antes de películas como "amores perros": que para afectar hay que hacer uso de una estética amarillista, "escandalizar". Terminan siendo más moralistas que quienes les criaron (por eso necesitan insultar o poner en ridículo al "interlocutor", y para solapar su moralismo siguen el lugar común de "burlarse de uno mismo", como si esto fuera garantía de cinismo, es decir, como si el cinismo fuera una garantía de "más allá" de la moralidad).

Atendiendo una de las cosas más repetitivas de esta columna (lo involuntariamente importante): el ataque a los del Plátano. Son unos revirones, no creo que pasen de eso, lo bueno -sin embargo- es que tratan de encadenar, de atar, de mezclar todo lo que pueden desde ese "ideario contestatario" al que no le veo mucha salida (no porque trabajen en el san ignasio). Quieren llamar la atención? Si. Sus pretextos son infantiles, inmaduros? no sé como respondar a esto, no sé quién puede ponerle un límite a "maduro-infantil". En todo caso estaría fuera de objeto el calificativo de inmaduro con ellos, pues la revista se llama "plátano verde" (es redundante que no les interesa nada "maduro", sea lo que eso sea).

No leí el ¿artículo? ¿crónica? de Gatopardo ni tampoco la nota de los del Plátano. Por tanto, no me atrevo a entrar en ese debate (que abre esta columna, y que obviamente fue lo menos importante).